Es el nombre que recibían tres “fuentes naturales” que existían en el pueblo. Una estaba situada a orillas de la “Laguna Espadañas” y que hoy queda cubierta por su maleza. Cercana a ella parece que existió un convento al que la fuente alimentaba de agua. Las otras dos estaban situadas en las “puentes de arriba”, en frente de la hoy bodega de Angel. La otra en las puentes de abajo, cercana al cruce del camino que va a las bodegas y el reguero. En ésta afirman que salía agua caliente en el invierno. Por este motivo durante esta estación las mujeres del pueblo se acercaban a ella y la aprovechaban para lavar la ropa.